Incontinencia: Unos sencillos cambios en el estilo de vida o un tratamiento médico pueden aliviar las molestias o acabar con la incontinencia urinaria.

La incontinencia urinaria, pérdida del control de la vejiga, es un problema de salud frecuente que suele estar relacionado con la edad. En la mayoría de los casos afecta a personas mayores, mientras que las mujeres son más propensas a sufrir incontinencia que los hombres.

Tipos de incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria, las pérdidas de orina, se producen cuando los músculos pélvicos son demasiado débiles o demasiado activos. Por lo tanto, existen distintos tipos de incontinencia.

• La incontinencia de esfuerzo se produce cuando los músculos que mantienen cerrada la vejiga son débiles, por lo que se producen pérdidas al estornudar, reír o levantar objetos pesados.
• El segundo tipo de incontinencia urinaria es la incontinencia de urgencia o vejiga hiperactiva. Si los músculos de la vejiga se vuelven demasiado activos, se puede sentir una fuerte necesidad de orinar aunque haya muy poca orina en la vejiga. La última, pero no menos difícil, es la incontinencia por rebosamiento, en la que no se puede vaciar la vejiga por completo.

Causas de la incontinencia urinaria

Las causas de la incontinencia urinaria son muy diversas. Las más comunes son la obstrucción del sistema urinario, problemas cerebrales o nerviosos, problemas de salud mental que dificultan sentir y responder a las ganas de orinar, problemas con el sistema urinario, problemas nerviosos y musculares. En algunos casos, la incontinencia aparece y desaparece por sí sola sin tratamiento especial, pero si se prolonga en el tiempo, hay que acudir inmediatamente al médico.

Los médicos de atención primaria pueden tratar la incontinencia tras realizar algunas pruebas para determinar cuál es la causa. Las pruebas más habituales son: cistoscopia (visualización del interior de la vejiga), PVR (residuo posmiccional) para medir la cantidad de orina que queda después de que el paciente orine, análisis de orina, urocultivos para detectar infecciones, estudios urodinámicos (para medir la presión y el flujo de orina), uroflujo (para medir el patrón del flujo de orina). El tratamiento variará en función de los resultados de las pruebas y de la causa de la incontinencia.

Tratamiento de la incontinencia urinaria

Existen dos tratamientos principales para fortalecer los músculos pélvicos: la retención de la vejiga, en la que se orina según un horario, independientemente de que haya o no necesidad de hacerlo, y los ejercicios de Kegel, en los que se aprietan los músculos del suelo pélvico durante 10 segundos y luego se relajan durante 10 segundos. Fortalecer los músculos pélvicos puede ayudar a controlar la vejiga y, por tanto, el proceso de orinar y el propio impulso.
Otros tratamientos incluyen una dieta con más fibra, se debe dejar de fumar así como evitar el alcohol y las bebidas de café junto con alimentos que estimulen la vejiga, y los diabéticos tienen que mantener controlado su nivel de azúcar.

En el Century Medical and Dental Center (Downtown Brooklyn, Gravesend y Flatbush), el médico de atención primaria diagnostica con éxito la incontinencia urinaria mediante la realización de una prueba PVR, una ecografía pélvica, un análisis de orina y un cultivo de orina. Una vez encontrada la causa, los médicos harán todo lo posible por encontrar el tratamiento adecuado para todos los pacientes que sufren incontinencia. Si es necesario realizar una intervención quirúrgica o pruebas más complejas, el médico de atención primaria afiliado al Brooklyn Hospital se encargará de organizar y garantizar el tratamiento médico posterior del paciente. La incontinencia urinaria puede resultar embarazosa y difícil de sobrellevar.

No lo dude, visite al médico de atención primaria y comience su tratamiento.
En Century Medical and Dental Center (Downtown Brooklyn, Gravesend y Flatbush) podemos devolverle los días felices.